carta de salvo

La agresión a una persona con carta de salvo era un delito agravado, penado duramente, y desde 1274 era uno de los delitos conocidos como casos de Corte, juzgados por la jurisdicción ordinaria. «Temiendo algunos omnes de ffuera de los rregnos que les ffaríen mal omnes de la tierra o les enbargaríen, demandan al rrey algunas vezes cartas con que vayan ssaluos e sseguros, e deuen sseer ffechas en esta guisa: Del rrey a todos los de ssus rregnos que la carta vieren e oyeren, cómmo les manda que aquel que la carta traye que vaya ssaluo e sseguro e que ninguno non ssea ossado de contrallarle nin de ffazerle tuerto nin ffuerça nin demás a él nin a ninguna de ssus cosas, ca qualquier que lo ffeziesse, quel pessaríe e que gelo acalopnaríe en el cuerpo e en las otras cosas ssegunt que en la carta dixiesse» (Espéculo, 4.12.33).