agregación

Se considera que en principio todos los bienes eran comunes, hasta que se inició el proceso de atribución personal de la propiedad, de acuerdo con el proceso que describe del siguiente modo: «Dios, como dice el rey David: […] entregó la tierra a los hijos de los hombres». Pero lo que ha dado Dios a todos puede ser apropiado por algunos sin el acuerdo expreso de todos los miembros de la comunidad por razón del trabajo. Es el esfuerzo y el trabajo lo que permite la apropiación de la propiedad: «[…] siempre que alguien saca alguna cosa del estado en que la naturaleza la produjo y la dejó, ha puesto en esa cosa algo de su esfuerzo, le ha agregado algo que es suyo propio y, por ello, la ha convertido en propiedad suya» (John Locke).