Fin. e
Hist. Durante el Antiguo Régimen, forma de recaudación indirecta, que con frecuencia se ha confundido con un impuesto indirecto que gravaba los productos de uso común fraccionables, consistente en la reducción de la cantidad de mercancía percibida por el comprador, pagando este el precio completo; la diferencia entre lo efectivamente percibido y el precio total pagado era la cantidad que se ingresaba a favor del fisco.No fue por tanto un impuesto, sino un método de recaudación indirecto que se aplicó tanto a los impuestos como a las contribuciones especiales, que se integraban en las rentas reales y en los servicios. Posiblemente fue impuesto por primera vez por Sancho IV, con gran oposición por ser considerado forma de tributo nueva y resultar vejatoria, especialmente para los estamentos privilegiados. Su carácter de forma de recaudación fue similar al de la alcabala. Se utilizó muy frecuentemente a partir de la Baja Edad Media para la recaudación de cantidades para subvenir las arcas municipales mediante el sistema de reparto de sisas; asimismo, la utilización de dicho sistema recaudatorio provocó a partir de las Cortes de Toledo de 1538 que Carlos I no volviera a convocar a los nobles (el alto clero apenas se convocaba ya), por negarse a que el pedido solicitado con motivo de dichas Cortes se cobrara mediante sisa.
